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Recopilaciones de Paul Nelson:

Actualmente, la situacion es practicamente lo contrario. Son los dibujos de Haeckel cuestionables los que han sobrevivido en los libros de textos y en publicaciones populares, mientras la evidente duda de su "ley biogenética" vive en la primera literatura, en gran parte desatendida.

La ley biogenética no es la base del desarrollo de la biología moderna. De hecho, la ley biogenética fue colapsada bajo (a) el peso de la evidencia contraria y (b) esta imprácticabilidad es una herramienta de investigación, incluso antes el nacimiento de la síntesis de neo-Darwinian (Rasmessen 1991). En 1894, Edmund Wilson, en sus lecturas a los Laboratorios Biológicos Marinos en Woods Hole, se aferraron a la ley biogenética primariamente responsable por " el vasto número de filogénes hipotéticas elaboradas las cuales confrontaron el moderno estudiante en dicha desconcertante confisión" (1895, p. 103). Como el continuó:

Esto es... solo un campo de reproches a los morfologístas que su ciencia debe ser quemada con dicha masa de especulaciones e hipótesis filogenéticas, muchas de ellas mutuamente exclusivas, en la ausencia de cualquier estandar de valores bien definido por lo cual pueda estimar su relativa probabilidad. La verdad es que la investigación después de hipótesis de trabajo sugeridas en morfología embriónica ha dejado frecuentemente las expeculaciones reveldes dañen el nombre de la ciencia; y podía ser una pequeña maravilla si el estudiante moderno, especialmente después de un entrenamiento en los métodos de la mas exacta ciencia, pudiera estimar todo el aspecto filogenético de la morfología como una clase excesiva minuciosidad no saludable de atenciones serias. (Wilson 1895, pp. 103-104)

Por consiguiente, en 1909, el embriólogo Cambridge Adam Sedgwick, por ejemplo, estaba ya buscando alternativas para la ley biogenética; como el escribió:

Si después de 50 años de investigación y examinación de cerca dee los hechos de embriología la recapitulación de la teoria sigue estando sin una prueba satisfactoria, es deseable coger una escoba ancha y buscar información de si el hecho embriológico no puede ser incluido en una categoria mas grande. (Sedgwick 1909, p. 176)

En 1922, en su repaso crítico de el concepto, Walter Garstang discutió que la ley biogenética " ha evocado poco pero contoversial y cofuso" (1922, p.81). Como continuó:

Como no es crédiro dela ciencia que la Zoología haya encubierto una "ley" la cual, como un credo, pueda ser aceptada o rechazada como placer, y como yo creo las bases de esta ley es demostradamente sin sonido, yo me arriesgo a renovar la atención a definir los puntos de este dilema. (Garstang 1922, p. 81)

Muchos de los descubridores de el neo-Darwinism (e.g., August Weismann) fueron intelectualmente refugiados por la tierra mágica el recapitilismo. Otros, como William Bateson (1894), abandonaron el programa de investigación de "la otogénie recapitulando la filogénie," después de su su entusiasmo inicial, porque ellos descubrieron que la otogénie no recapitula la filogénie en ningún sentido aproximado, y es más que la "ley" sufrió de grandes defectos metodológicos. (1894, p. 8).

La ley biogenética es falsa, y ha sido sabido ser buena hace acerca de un siglo.

Para mas información, ve Michael Richardson et. al., ""There is no highly conserved stage in the vertebrates: implications for current theories of evolution and development," Anatomy and Embryology 196 (1997): 91-106.

También ver:

Hall, Brian. 1995. Homology and Embryonic Development. Evolutionary Biology 28: 1-37.

Horder, T.J.. 1989. Syllabus for an Embryological Synthesis. In Complex Organismal Functions, eds. D.B. Wake and G. Roth. New York: John Wiley.

Nieuwkoop, P.D. and Sutasurya, L.A. 1976. Embryological evidence for a possible polyphyletic origin of the recent amphibians. Jl. Embry. exp. Morph. 35(1):159-167.

Raff, Rudolf, Gregory Wray, and Jonathan J. Henry. 1991. Implications of Radical Evolutionary Changes in Early Development for Concepts of Developmental Constraint. In New Perspectives in Evolution, eds. L. Warren and H. Koprowski; New York: Wiley-Liss; pp. 189-207.

Estas citas proveen una buena introducción hácia la literatura relevante.

Referencias

Bateson, W. 1894. Materials for the Study of Variation. Baltimore: Johns Hopkins Univ. Press [1992 reprint].

Garstang, W. 1922. The Theory of Recapitulation: A Critical Re-Statement of the Biogenetic Law. Linnean Journal - Zoology 35: 81-101.

Rasmussen, N. 1991. The Decline of Recapitulationism in Early Twentieth- Century Biology: Disciplinary Conflict and Consensus on the Battleground of Theory. Journal of the History of Biology 24:51-89.

Sedgwick, A. 1909. The Influence of Darwin on the Study of Animal Embryology. In Darwin and Modern Science, ed. A.C. Seward. Cambridge: Cambridge Univ. Press, pp. 171-184.

Wilson, E. 1895. The Embryological Criterion of Homology. Sixth Lecture, Summer Session 1894. Biological Lectures Delivered at the Marine Biological Laboratory of Wood's Hole. Boston: Ginn & Co., pp. 101-124.

______________________________________________________ Ó 2010 Arthur V. Chadwick, Ph.D.